Ya es oficial. El príncipe Carlos Felipe de Suecia y su
novia, Sofía Hellqvist, se casan. "Sofía ha contestado hoy que sí cuando
le he preguntado si estaría dispuesta a casarse conmigo.
Hoy es un día feliz
para Sofía y para mí", expresó ayer el hijo de los monarcas suecos en la
rueda de prensa que anunció su matrimonio, según lo cita el diario Aftonbladet.
Y si la pareja, que se conoció en 2010 en Bastad y al año
siguiente ya vivía junta, va a pasar por el altar es porque el rey Carlos
Gustavo ha dado, por fin, su consentimiento.
Según anunció ayer Svante
Lindqvist, mariscal del reino escandinavo, el monarca ha solicitado ya la
aprobación del matrimonio por parte del Parlamento, como dicta la Constitución
sueca. "La fecha del enlace aún no se ha decidido pero se planea que tenga
lugar durante el verano de 2015", añadió en el comunicado emitido por la
Casa de los Bernadotte.
La pedida, contaron los novios a los periodistas
congregados, tuvo lugar ayer mismo "en un lugar que nos encanta",
pero que no desvelaron.
"Yo no entendía lo que estaba pasando hasta que se
puso de rodillas. ¡Fue una sorpresa maravillosa! Este es el mejor día de mi
vida", dijo Sofía. "Todavía estoy un poco perpleja, pero feliz",
añadió enseñando el anillo de compromiso, para confesar:
"Yo tenía el
presentimiento de que (la pedida) iba a suceder en un futuro próximo, pero que
haya sido esta mañana ha sido un shock impresionante".
La relación de Carlos Felipe y Sofía, de 35 y 29 años
respectivamente, no ha estado exenta de polémica por el pasado de la joven como
modelo y no precisamente de ropa.
Con 20 años fue coronada Miss Slitz por la
revista masculina del mismo nombre, en la que posó sugerentemente en un
escenario selvático con una serpiente enrollada al cuello que la cubría casi
más que el bikini (cuando lo llevaba puesto).
Un año después, en 2005, participó en un reality televisivo
llamado Paradise Hotel, una suerte de Gran Hermano con escenas escandalosas
incluidas.
Sofía no protagonizó ninguna salvo, tal vez, la que aún circula en
internet y está colgada en Youtube, en la que tumbada boca abajo con sólo la
parte inferior del traje de baño un compañero le masajea la espalda.
Finalizado el programa, la joven se mudó a Nueva York,
escribió un blog y trabajó como monitora de yoga durante un tiempo. Después, en
2009, fue voluntaria en Ghana y un año después conocía a su ahora prometido, el
único hijo varón de los reyes Carlos Gustavo y Silvia.
Desde entonces los jóvenes, que comparten un piso de 114
metros cuadrados en la idílica isla holmiense de Djurgården, han tenido que
esmerarse por rehabilitar la imagen de pin up de Sofía, que al comienzo no
contaba con el beneplácito de su futura familia política.
Así, a finales del año pasado, cuando los rumores de una
posible boda se hacían cada más intensos, la cadena televisiva sueca TV3 emitía
un programa documental en el que la futura princesa mostraba su faceta más
solidaria en Sudáfrica.
Allí, en el municipio de Langa, la ex modelo desarrolla
un proyecto junto con una amiga, Frida Vestlund, para ayudar a la infancia.
En este cambio de imagen de la ex modelo, en cualquier caso,
lo más evidente ha sido su aspecto físico, continuamente comentado por la
prensa rosa sueca. "Sofía Hellqvist hoy es una joven sofisticada",
anunciaba el diario Expressen haciendo un seguimiento de su imagen.
Se acabaron
los prominentes escotes en pico y los vaqueros de cadera baja, "su estilo
ha evolucionado mucho en los últimos años y sólo para mejor. Tiene un estilo
más elegante y adulto", escribía la experta en moda de dicho diario.
Para esta nueva imagen, apuntan algunos medios suecos, la
joven podría haberse inspirado en sus futuras cuñadas, concretamente en la
princesa Magdalena, con la que se lleva dos años, pero con la que habría
mantenido —al menos al comienzo— una relación tirante.
Dicen las malas lenguas
que la pequeña de los Bernadotte le dijo a su hermano que ni se le ocurriera
llevar a su boda a la mujer que sustituye a su mejor amiga. Y es que Carlos
Felipe salió durante una década con su íntima Emma Penald. No obstante, la
pareja acudió junta a la boda de la princesa con el británico Chris O’Neill.
Se dice que fue la reina Silvia quien propició la aceptación
de la joven en el seno de la familia real, que desde ayer es oficial.
"Sofía es una persona muy agradable y siempre hemos pasado buenos ratos
juntos", afirmó ayer el rey Carlos Gustavo. Quién sabe si se convertirá en
la más popular de la familia.
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