Su aventura en la Luna apenas ha durado un mes y medio. El vehículo robótico chino Yutu (que en mandarín significa Conejo de Jade) parece que no ha sido capaz de sobrevivir a la inhóspita noche marciana, que dura dos semanas terrestres y durante la que se alcanzan hasta -180º C.
Según ha informado la Administración Estatal de Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa Nacional (SASTIND) en un breve comunicado, han surgido problemas técnicos en el sistema que le ayuda a proteger sus instrumentos durante esa fase. No obstante, sólo ha detallado que el fallo «se debía al complicado entorno de la superficie lunar».
Yutu llegó a la Luna el 14 de diciembre a bordo de la sonda no tripulada Chang’e-3. Pocas horas después, el rover comenzó a recorrer la planicie lunar Sinus Iridum (Bahía de los Arcoíris). La avería fue detectada poco antes de que el robot entrara en fase de hibernación para resguardarse de la noche lunar, pues la ausencia de Sol impide que llegue energía a los paneles del vehículo explorador. También la nave Chang’e-3 apagó la mayor parte de sus sistemas temporalmente.
Pese al revés que supone la incertidumbre sobre si podrán completar esta misión, que en principio iba a durar tres meses, conseguir que una sonda aterrizara en nuestro satélite ha sido una hazaña tecnológica y una demostración internacional de los progresos del ambicioso programa espacial chino. Hasta ahora sólo EEUU y la antigua URSS lo habían logrado.
Aunque los ingenieros están intentado resolver los fallos técnicos, no parece que tengan demasiadas esperanzas de que pueda volver a operar dentro de unos días. La agencia Europa Press recoge los datos apuntados por el Diario del Pueblo, el periódico oficial del Gobierno chino, que afirma que Yutu no podrá volver a despertarse.
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